pavo
PAVO (98), esa majestuosa ave que, con su plumaje desplegado, ofrece un espectáculo de colores y texturas. El pavo, en muchas culturas, es símbolo de abundancia y celebración, siendo protagonista en festividades donde las familias se reúnen alrededor de la mesa.
Ahora, al pensar en PAVO y SAUNA (62), imagina un paisaje invernal en un frondoso bosque nórdico. Entre la espesa nieve y los pinos helados, hay un claro donde se alza una cabaña de madera, desde la cual emergen vapores acogedores. Dentro, en lugar de las tradicionales piedras calientes, hay pavos relajándose, extendiendo sus plumas mientras disfrutan del calor y la humedad. Estos pavos han descubierto el secreto de una buena sauna para mantener su plumaje en perfecto estado. Los animales del bosque, curiosos, a menudo se asoman por las ventanas, maravillados por este inusual pero armonioso spa para aves.
Por otro lado, al vincular PAVO con NAIPE (29), vislumbra un salón antiguo con paredes tapizadas de terciopelo rojo. En una mesa de madera tallada, un grupo de pavos juega animadamente una partida de cartas. Cada ave sostiene en su pico un naipe, discutiendo estrategias y haciendo apuestas con granos de maíz dorado. Son jugadores experimentados, y cada pluma que se despliega o repliega es una señal, un código secreto entre compañeros de juego. Es un club exclusivo donde el juego y la estrategia se encuentran en cada partida.
Así, la imagen de un pavo nos transporta a escenas insospechadas, fusionando lo cotidiano con lo extraordinario.